Jake y Rosa intentan atrapar a un infame ladrón de autos con la ayuda de un sospechoso y supuesto testigo, Doug Judy, que resulta ser el bandido de Pontiac. Holt intenta encontrar un hogar para dos cachorros. El resto del recinto lucha por acomodar a un Charles herido cuando regresa de ser herido en acción. Boyle decide regresar a casa hasta que esté mejor y lleva a los perros para hacerle compañía.