El Rey Helado finalmente se va a casar con alguien, pero les resulta mal a Finn y Jake, ya que el Rey Helado está entre dos decisiones: Seguir adelante con la boda o continuar por el camino de raptar princesas.
Finn desciende a una gruta con la esperanza de encontrar una aventura, pero desafortunadamente encuentra solamente obstáculos que se ajustan mejor a las habilidades de Jake que a las de él solo.