Ahora que Kenichi a perdido, sus maestros se disponen a darle un entrenamiento mas duro. En las siguientes sesiones se muestran raramente con amables con Kenichi. Allí le proponen que se vuelva un discípulo residente en el Dojo. Y aunque en un primer momento se niega, Ma consigue “convencerlo”. Sin embargo al llegar no era para nada como lo pinto Ma; y cuando se sentía ya derrotado en la noche de su primer día; lee una carta de su padre. Luego sale con su maestro, y aunque no sale como lo esperaba, logra convencerse de quedarse en Ryozanpaku.
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