Chano es un niño de una remota comunidad indígena en las montañas de México, tiene la responsabilidad de caminar durante horas para llevar al mercado callejero de los domingos los ídolos de los «Tecuanes» que son hechos a mano por Cenobio, su abuelo. El anciano enfermo Cenobio compartió con Chano la leyenda y la tradición ancestral de los tecuanes «Cuilli y Macuilli». Días después Chano vende los ídolos a una pareja de turistas y con el argumento de que la leyenda es interesante, los turistas le sugieren a Chano que vaya a vender los ídolos a la ciudad haciéndole creer que mejorará sus condiciones de vida.\n\nChano convence a Cenobio de ir a la ciudad dejando atrás a su madre y su hermano. Mientras tanto, los ídolos y su historia son entregados, robados y utilizados por diferentes propietarios para lograr sus propósitos, ambiciones y necesidades.