Jessica Comley es una agente estadounidense de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos en la frontera entre Arizona y México. En este desierto implacable, está orgullosa y decidida a defender a Estados Unidos contra los narcotraficantes y los inmigrantes ilegales por cualquier medio necesario. Pero su implacable superación de los límites lleva a que una de sus intervenciones salga mal cuando mata a un inofensivo migrante delante de tres testigos: su colega, que intenta encubrir el crimen, y un nativo americano con su nieto. Frente a las autoridades, es su palabra contra la de ellos.