Nigel viaja 65 millones de años atrás para localizar al devastador depredador e indudable rey de los dinosaurios: el Tyrannosaurus rex. Su búsqueda comienza en Montana, Norteamérica, donde se han encontrado muchos restos fosilizados de esta formidable criatura. Montana nos parecería un lugar extraño ahora; la hierba no evolucionaría hasta dentro de 30 millones de años y los volcanes dominarían el paisaje, pero se reconocerían los árboles: ¡las araucarias, todavía las tenemos hoy y eso las convierte en fósiles vivientes!