Noir visita a Sinners para frustrar el plan de Lawrence y proteger a aquellos que no lograron convertirse en espíritus. Noire, que tiene una pistola de balas en el corazón preparada para él, se encuentra con Silvette cuando sale de la tienda. A pesar de notar el cambio en su hermano, Silvette actúa como si nada y le importa. Noir está obsesionado por los pensamientos de Silvette…